DE SUEÑOS A COSTURAS: ENTRE HILOS Y DETERMINACIÓN
Desde las inspiraciones hasta los desafíos superados, una narrativa de tres amigas sobre la fundación de una marca colombiana hecha con dedicación y amor.
Para contar la historia de Vintro, hay que empezar por Naty, Ana y Cata, sus creadoras. Ana y Naty son amigas desde el colegio; Ana y Cata se conocieron en Londres; Naty y Cata empezaron siendo socias y ahora son grandes amigas.
Eran tres emprendedoras en busca de un sueño que las unía, ahora somos Vintro, una familia, un equipo, un grupo de amigos que comparten una pasión.
Vintro nació en el 2011, es una marca Slow Fashion (moda sostenible que perdura en el tiempo) y utilizan cuero vegano. Es una marca con sentido social, ambiental.
¿QUIÉNES SOMOS?
Ana María Valderrama es administradora de empresas de EAFIT.
Le encanta la moda, siempre ha sido muy negociante y desde el colegio ha vendido cosas. Es amigable, confiable y se hace querer muy fácil. Le encanta montar en bicicleta y es la Directora de producción. Su lema: Hacer todo con pasión.
Catalina Toro es administradora de empresas de EAFIT y Gerente de Vintro. Estratégica, arriesgada, dedicada, le gusta hacer bromas de vez en cuando. Es mamá de Emilio y Guadalupe. En su primer embarazo tuvo claro que quería emprender. Trabajó en Bancolombia, pero renunció para apostarle a hacer empresa en Colombia y dedicarle más tiempo a su familia.
Natalia Pineda es diseñadora industrial de la universidad Pontificia Bolivariana. Mamá de Sara, le encantan los perros, viajar y sobre todo si es al mar. Divertida, alegre, extrovertida y soñadora. Es la Directora Creativa y Diseñadora. Piensa que la música lo soluciona todo. Le encanta bailar, cantar y crear cosas increíbles.
HISTORIA
Vintro empezó siendo un hijo de Color Plus, un lugar de fotografía donde las personas podían hacerse un foto estudio y personalizar sus fotos imprimiéndolas en mugs, cojines, cuadernos y demás accesorios. Incluso, la razón social de Vintro es Color Plus Fotografía S.A.S., empresa que ya no existe pero fue el abrebocas de lo que hoy es Vintro.
«Ana María se fue a Londres, en medio de la universidad, de intercambio, y allá conoció a Catalina. Cuando regresó me dijo: una amiga me está proponiendo que montemos un negocio», cuenta Naty muy emocionada.
Así que empezaron a traer bolsos de Europa y a venderlos en una tienda bajo la marca de Vintro. Después de pocos días empezaron a recibir devoluciones por su mala calidad. Así se dieron cuenta que realmente eran hechos en China. Este suceso fue la oportunidad perfecta para que ellas empezaran a crear sus propios diseños inspirados en las grafías y los paisajes sociales europeos.
- Maria Andrea Calero